No hay duda que los episodios de clima extremo están resultando cada vez más frecuentes. En estas circunstancias, no solo hay que buscar soluciones para el aislamiento de las cubiertas. Hay que tener también muy en cuenta otras cuestiones como el bienestar animal, el respeto al medio ambiente y las condiciones de trabajo de los propios ganaderos, sin perder de vista la rentabilidad de la explotación.

Por tanto, habrá que disponer medidas para tratar de reducir el estrés térmico de los animales. También para facilitar la limpieza y desinfección de las instalaciones, lo cual redundará a su vez en una mayor durabilidad de las instalaciones.

De esta manera, se puede actuar sobre las cubiertas mediante el empleo de paneles aislantes de fibrocemento y el complemento soluciones para la ventilación pasiva. Al ser de fácil limpieza y desinfección, se resuelven muchas cuestiones desde el punto de vista biosanitario. Además, al no ser susceptibles a la corrosión producida por los gases de la nave, se trata de una elección muy duradera y rentable.